La importancia de llamarse...

“OPINO QUE LO QUE SE LLAMA BELLEZA, 

RESIDE ÚNICAMENTE EN LA SONRISA”

León Tolstoi

En verdad, la belleza reside en la sonrisa. ¿Acaso no te parece que una simple sonrisa te alegra la mañana? Desde mi punto de vista, una sonrisa enamora mucho más que la belleza exterior de una persona, ya que lo exterior con el paso del tiempo acaba marchitándose como si de una rosa se tratara. La sonrisa es la más bella curva que podemos encontrar en el resto de caras.

León Tolstoi

León Tolstoi nació el 9 de septiembre de 1828 en el sur de Moscú. Formó parte de una familia acomodada ya que su padre fue el conde Nokolai Ilich, terrateniente, y su madre era la princesa Volkonskaia. Con tan solo 11 años quedó huérfano de padre y madre lo que hizo que tanto él como sus hermanos estuvieran tutelados por sus tías paternas.

En 1851 se incorporó al ejército donde se puso en contacto con los cosacos que se convirtieron en los protagonistas de una de sus novelas titulada Los cosacos.

El primer libro que escribió se llamó Las cuatro épocas del desarrollo  considerándolo como un símbolo. Esta obra hace una reflexión sobre el carácter del hombre desde el comienzo hasta la muerte.

De 1852 a 1856 escribió tres obras autobiográficas tituladas Infancia, Adolescencia y Juventud. En 1855-1859 se encontró Sebastopol, tres historias basadas en la guerra de Crimea.

En 1862 se casó con Sofía Andréievna Bers con quien tuvo quince hijos. Tras esto, escribió sus dos novelas más conocidas: Guerra y Paz y Ana Karenina. También escribió otras obras como Confesión, un ensayo titulado Amo y criado e incluso escribió una condena de casi todas las formas de arte a la que llamó ¿Qué es el arte?

Con 82 años, Tolstoi falleció en una estación de ferrocarril debido a que tenía una pulmonía y decidió escapar del hospital.

Ana Karenina

Para realizar esta entrada, hemos ido al artículo titulado La importancia de llamarse Karenina donde se critica que las mujeres (algunas a día de hoy) tengan que adoptar el apellido de su marido.

¿Por qué una mujer tiene que abandonar su apellido de soltera? ¿A caso no tenemos mujeres y hombres los mismos apellidos? La verdad es que antiguamente el adoptar el apellido del hombre era muy común, pero todos los humanos de este planeta tenemos nombre y apellidos que no han de cambiar por ninguna razón.

Eso de llamar a las mujeres “Señora de tal” me parece que es una forma en la que el hombre marca territorio, ya que ese “de” suena a propiedad e incluso a dependencia.

En España, hace unos años se seguía usando esa forma para dirigirse a las mujeres, pero afortunadamente, las mujeres actualmente siguen teniendo los apellidos de sus padres.

Con esa conclusión, puedo decir que en todos los países en los que ocurría u ocurre esto es porque tienen una cultura un tanto machista y también he de decir que los lugares que han conseguido acabar con este tipo de actuaciones tienen que apoyar a todos aquellos en los cuales las mujeres sufren algún tipo de discriminación para acabar con ella.

Isaac García Ramos